Adeu a Jordi Torrent Bestit (Pepe Gutiérrez-Álvarez, 2020)

La amiga Ana ya me informó de sus trágicas vicisitudes y soledades, de sus ingresos y su estado, y desde entonces he lamentado que mi problemas de movilidad me impelieran de visitarlo como era de rigor para alguien con la que tanto he coincidido en toda clase de actos y debates, buena parte de ellos organizados desde la Fundació Andreu Nin en Barcelona, pero también en Madrid.  En este último caso para tratar sobre Cornelius Castoriadis del que era un riguroso experto como demostró en el número especial que le dedicó la revista «Archipiélago». Jordi colaboró en empresas editoriales como la edición «El POUM y «el caso Nin. Una historia abierta» (Laertes), así como en los debates sobre el destino de la revolución rusa de la que me quedan los últimos recuerdos de charla, de bromas e ironías, y cómo no, de proyectos en los que ya no me era posible participar desde Ribes, donde fue reiteradamente invitado pero nunca tuvo ocasión de visitar para comer, charlar y pasear por el Garraf.

Camarada cultivado y modesto como pocos, Jordi editó con su erudición la edición de las controversias entre Sartre y Camus que se publicaron en la colección on line “Cosecha roja” de Kaosenlared. No era muy dado a hablar de su vida, representaba el tipo de sabio modesto y extremadamente cultivado con el cual podían dar las horas de conversación como sucedió con ocasión de las jornadas sobre los escritores contra el estalinismo así como sobre Albert Camus, éste última el Palau de la Virreina en compañía de “Fito” Ruiz , también fallecido hace poco y experto en Camus, en el caso del autor teatral.

Ignoro casi todo su trayectoria sobre la cual era extremadamente discreto, de su perceptible militancia o afinidad con “Socialismo o barbarie”. Su tono era amistoso y muy reposado, situado entre el público tenía la virtud de la intervenciones modestas pero sólidamente trabadas.

Su final solitario en medio de la pandemia. Llevado de un lado para otro, fue gracias Ana que la información llegó a alguno de sus amigos, por lo que espero que no haya fallecido en una soledad inmerecida. Al parecer sus familiares eran muy pocos y mayores, y al final encontró el aliento de camaradas como Joan Tafalla y Alejandro Andreassi que son los que ahora ofrecen la noticia con un pequeño homenaje en un tiempo en el que esta exigencia tan humana no resulta viable.

Aportaciones de la Fundación Andreu Nin a la Ley de Memoria Democrática (julio 2020)

Al Secretario de Estado de Memoria Democrática, D. Fernando Martínez
Al Director General de Memoria Democrática, D. Diego Blázquez

En el marco de la Consulta Pública sobre la propuesta de Ley de Memoria Democrática D. Enrique del Olmo García, en calidad de Presidente de la Fundación Andreu Nin.

Ante la consulta pública para la modificación y profundización del contenido normativo de la Ley 52/2007 de 26 de diciembre, la Fundación Andreu Nin aporta las siguientes consideraciones:

La elaboración de una nueva ley sobre la Memoria Democrática responde a la necesidad de reconocer la memoria de quienes lucharon por la libertad y la democracia, desterrar definitivamente de nuestra sociedad el franquismo y todo lo que representó.

Entendemos que organizar la convivencia entre los ciudadanos y los pueblos es incompatible con la impunidad, con mantener en el desprecio los restos de los asesinados por el levantamiento franquista y por la dictadura. ¿Qué educación democrática pueden tener las jóvenes generaciones en una sociedad que acepte decenas de miles de asesinados sin reconocimiento, justicia ni exhumación? Y lo mismo vale para las sentencias de tribunales facciosos, aún en vigor.

La situación económica no justifica que se posterguen estas acciones. Se nos llama a pagar deudas, a reparar perjuicios, ¿quién puede pretender que esto se haga dejando sin enterrar a los bisabuelos o con que ciudadanos estén condenados por haber luchado por la libertad?

Entendemos que es responsabilidad del Gobierno aglutinar para las acciones de reparación de los derechos de las víctimas del franquismo a todas las formaciones que luchan por la Memoria Histórica, así como a la mayoría de los ciudadanos y pueblos. Es indispensable un gran movimiento reparador.

En particular, queremos referirnos a:

A) La exhumación de todas las víctimas del franquismo y la dictadura no reconocidas

Es lo más urgente y hay una gran coincidencia al respecto. Es hora de que se conviertan en ley los artículos 1 al 4 de la antes mencionada proposición de ley socialista, con colaboración de las administraciones, víctimas, asociaciones. Lo cual es compatible con propuestas contenidas en otros proyectos de ley.

B) La nulidad de las sentencias de los tribunales franquistas y la reparación de la justicia

El levantamiento militar y civil del 17-18 de julio de 1936 y los largos años de dictadura de aquellos facciosos fueron una gigantesca operación contra las libertades y derechos de los ciudadanos y pueblos, con consecuencias que según los casos perviven.

Es preciso que la nueva Ley declare la ilegitimidad y nulidad de las actuaciones y sentencias de los tribunales especiales para la represión, desde los consejos de guerra hasta el Tribunal de Orden Publico, porque el conjunto de sus actuaciones, incluidas las sentencias, correspondieron a tribunales ilegítimos que actuaron contra Derecho, y también de cualquier
tribunal, jurado y otros órganos penales o administrativos que actuase contra los que se opusieron al levantamiento del 17-18 de julio y resistieron contra él defendiendo los derechos y las organizaciones obreras y republicanas.

Junto a la reparación se hace imprescindible situar la centralidad de la Justicia en la recuperación de la Memoria Democrática y para ello es necesario:

a) Privar de efecto aquellas disposiciones de la Ley de Amnistía que dejan impunes las violaciones de derechos humanos y delitos de lesa humanidad.

b) Recuperar el ejercicio de la jurisdicción de justicia universal, impulsando la colaboración de la justicia española con causas impulsadas por la justicia de otros países contra los crímenes del franquismo.

C) Facilitar el acceso a todos los archivos y fondos

Revisar aquellos criterios de privacidad y confidencialidad que impiden el estudio y manejo de los mismos, aplicando los criterios internacionales establecidos en la materia. La ley de Memoria Democrática debe eliminar las trabas y barreras que impiden o dificultan la investigación y acceso a la verdad.

Se hace imprescindible la derogación de la Ley de Secretos Oficiales

D) Creación de la Comisión de la Verdad

La nueva Ley debe determinar el fin de un oscurantismo e impunidad que en parte permanece a los 84 años de 1936.

De acuerdo con las recomendaciones del relator especial de Naciones Unidad, Pablo de Grieff, en su informe de 22 de julio de 2014 el Congreso de los Diputados debe crear una Comisión de la Verdad para todo el ámbito
estatal, como órgano temporal y de carácter no judicial con la finalidad de conocer la verdad de lo ocurrido, contribuir al esclarecimiento de las violaciones a derechos humanos y las graves infracciones cometidas, promoviendo así el reconocimiento de las responsabilidades de quienes participaron en la comisión de crímenes de lesa humanidad. El Estado deberá dotar de los recursos necesarios para ello como forma de favorecer la convivencia democrática.

Esta Comisión actuará con plena autonomía en su investigación y reconocimiento de la verdad. Requerirá, recuperará y recopilará los testimonios orales y otros materiales relativos al periodo histórico referido en la presente Ley. Reunirá e incorporará los informes y conclusiones alcanzadas por las diversas comisiones de la verdad o grupos de trabajo creados a escala autonómica o local. Tendrá acceso a los documentos históricos, sin limitación de acceso a los mismos por su condición de material clasificado o secreto o por el lugar en el que se encuentren, dentro o fuera del territorio nacional, testimonios y otros materiales para
elaborar un informe final incluyente y global.

Su informe sobre las violaciones a los derechos humanos y la comisión de crímenes de lesa humanidad y de guerra propondrá al Congreso medidas de reparación integral de las víctimas que estime convenientes así como otras para organizar la convivencia en el futuro.

Lo que antecede para nada subvalora la lacerante urgencia de resolver el asunto de los bebés robados, y las exigencias de cualquier víctima, que requieren el apoyo incondicional de todos los que propugnan la Memoria Histórica.

Reconocemos el trabajo que la Secretaria de Estado y la Dirección General de Memoria Democrática realizan para ordenar las aspiraciones de millares de ciudadanos que llevan décadas recabando una reparación justa lo que supondría a la vez una mejora cualitativa de nuestra calidad democrática y de nuestro marco de convivencia.

En Madrid, a 8 de julio de 2020

Operación Nikolai o el asesinato de Andreu Nin (Maria Dolors Genovés, 1998)

Este artículo figura en Història política, Societat i Cultura dels Països catalans (Barcelona, 1998). Lo tradujo al castellano Wilebaldo Solano. Agradecemos a Maria Dolors Genovés, directora del film Operación Nikolai, que nos haya permitido reproducirlo en esta página.

Andreu Nin y el POUM eran incómodos. Lo eran para Stalin y, por extensión, para todos los que obedecían al comunismo internacional. La posición revolucionaria de los poumistas desde el comienzo de la guerra civil, las campañas de La Batalla contra las purgas estalinistas de la vieja guardia bolchevique de la URSS y contra los intereses que se ocultaban detrás de la llamada ayuda soviética a la República determinaron que el POUM y su líder fueron considerados como enemigos a destruir.

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Camus en la revolución de Asturias (Ángel García Pintado, 1978)

Artículo escrito en 1978, a raíz de la publicación del libro «Rebelión en Asturias» (Albert Camus. Introducciones a carpo del historiador David Ruiz y del crítico José Monleón, autor asimismo de la versión, Ediciones Ayalga, Asturias, 1978). Texto revisado por el autor.

A raíz de estallar la guerra civil en España, Albert Camus, con tres profesores de Argel, escribe en colectivo una tragedia de homenaje y propaganda, conmemorativa del «octubre rojo» asturiano de 1934. Ahora el texto acaba de ver la luz en España. Ahora, a punto de cumplirse los cuarenta y cuatro años de aquella gesta, ésta podría muy bien ser conmemorada con la representación que entonces no pudo ser…

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Luxemburg: revolucionaria, feminista (Raya Dunayevskaya, 1978)

Carta redactada por Dunayevskaya el 9/8/1978 y enviada por ella a diversas mujeres feministas antes de iniciar la escritura del libro Rosa Luxemburg, Women’s Liberation, and Marx’s Philosophy of Revolution. Original en ingles en News & Letters, volumen 43, nº 4, mayo de 1988, página 4. http://newsandletters.org/PDF-ARCHIVE/1998/1998-05.pdf . Versión castellana de Trasversales nº 48, 2019 (especial Rosa Luxemburg).

«La revolución es magnífica y todo lo demás son sandeces» Rosa Luxemburg

Queridas hermanas:

Como la dialéctica siempre nos revela antes de empezar a escribir facetas en las que nunca habíamos pensado, he vacilado a la hora de decir algo sobre Rosa Luxemburg cuando ni siquiera he iniciado la escritura del libro sobre ella. Pero dado que la idea misma de una filosofía de la revolución en Marx genera polémica, me atreveré a enunciarla aunque aún no estoy satisfecha de la articulación que sobre ella me he hecho en mi cabeza. Algunas investigadoras que hoy se niegan a considerar las teorías de Rosa por pensar que no escribió sobre la Liberación de la Mujer están utilizando la magnífica cita que abre esta carta como «prueba» de que ella minimiza la singularidad de las mujeres, ¡como si la revolución y las mujeres fueran polos opuestos!

La verdad es que no se puede dar mayor prueba de la total amplitud de su concepto de la revolución como única vía para extirpar de raíz una sociedad explotadora, racista y sexista. Hace poco encontré una carta que Rosa había enviado a Hans Diefenbach desde la cárcel, en la que habla, entre otras cosas, de una reseña sobre una representación de la obra «Como gustéis», de Shakespeare, escrita por el profesor Morganstern. La reseña le gustó tanto que reproduce una larga cita de ella: «‘Este no es el único caso en el que Shakespeare dibuja este tipo de joven segura de sí misma, lo hace varias veces en sus obras. No sabemos si alguna vez conoció a una mujer como Rosalyn, Beatrice o Portia, si se inspiraba en modelos reales o si sacaba esos personajes de su propia imaginación. Pero lo que sí sabemos es que, a través de estos personajes, nos habla de su propia visión de las mujeres. Estaba convencido de que la mujer puede ser tan magnífica a causa de su naturaleza especial. Al menos en una fase de su vida, ensalzó a la mujer como pocos poetas lo hicieron, viendo en ella una fuerza de la naturaleza a la que la cultura nunca podría echar a perder». Entonces Rosa comenta: «¿No es un buen análisis? ¡Si supieras el tipo de pez insípido, seco y extraño que el profesor Morganstern es en privado! Pero su penetración psicológica es justo lo que yo desearía para el futuro creativo del ensayismo alemán».

Llamo la atención sobre esto aunque no tenga nada que ver con las teorías de la revolución y muy poco que ver con el «papel» de las mujeres, ni tampoco tenga nada que ver con el asunto del derecho a voto de las mujeres, por el que Rosa luchó y escribió aunque eso suela ser ignorado en las investigaciones sociales sobre la mujer. Y no lo hago porque Rosa hubiera hablado poco sobre las mujeres, sino porque en esa carta las mujeres de las que habla no son las mujeres obreras y las mujeres socialistas con las que ella había trabajado. Más bien, habla de las mujeres como personajes en la literatura de un dramaturgo genial que ciertamente no fue un «revolucionario proletario»; y considera «insípido» al crítico que cita. ¿Por qué, entonces, le prestó atención y por qué lo destaca? La respuesta tiene que ver con la multidimensionalidad de Rosa Luxemburg, como revolucionaria y como ser humano; al escribir desde la cárcel a un joven socialista, le preocupa que «el futuro creativo del ensayismo alemán» tenga una «profunda penetración psicológica» de lo magnificente de las mujeres.

En una palabra, cuando escribe sobre lo magnífica que es la revolución y dice que lo demás son sandeces no está menospreciando a las mujeres. Más bien, el futuro al que aspira es una totalidad. Lo que tenemos que entender, especialmente en la actualidad, es que no existe ninguna contraposición entre revolución y mujer. Todo lo contrario. Si decidí cambiar el título de mi proyectado libro sobre Rosa Luxemburg y su relación con las teorías de Marx, de «Marx’s theory of revolution» a «Marx’s PHILOSOPHY of revolution», es porque cuando sólo hablamos de teoría estamos hablando sólo de la inmediata tarea de la revolución, el derrocamiento del capitalismo, pero cuan do hablamos de filosofía de la revolución no nos referimos sólo a eso, sino a la creación de una nueva sociedad. Sólo teniendo esto en mente podrá la revolución ser verdaderamente total.

Al mismo tiempo, lo que da más amplitud al libro que he proyectado es que tomar la filosofía de la revolución de Marx como punto de partida nos da la oportunidad de considerar una revolución específica, la rusa de 1905, en la que tres grandes revolucionarios, Luxemburg, Lenin y Trotsky, se involucraron, destacando cada cual lo que consideraba el mayor logro de esa revolución y tomándolo como uno de los cimientos de la preparación de la revolución futura. Lo que queremos analizar para nuestra época es precisamente la posibilidad de construir sobre tales cimientos. No hay ninguna duda de que Rosa estaba tan enamorada del proletariado en tanto que fuerza revolucionaria que parece que ella subsumía a la mujer en su concepto de lo revolucionario. Pero tampoco hay ninguna duda de que trabajó estrechamente con Clara Zetkin en todos los aspectos del movimiento de mujeres, desde el sufragio hasta el antiimperialismo. Y , de hecho, la mayoría de quienes participan en el movimiento antiguerra en centros industriales tan cruciales como Hamburgo adherían a sus teorías y actividades. No cabe duda de que las cartas que escribió a mujeres, especialmente desde la prisión, eran de una naturaleza tan profunda que revelaban toda su filosofía. Consideremos su carta a Mathilde Wurm, que ya he citado en otras ocasiones: «Os prometo que en cuanto salga de la cárcel llegaré con trompetas, látigos y lebreles para cazar y dispersar a vuestro coro de sapos -iba a decir como Pentesilea, pero, ¡por Dios!, no sois Aquiles- ¿Estáis hasta las narices de mi felicitación de Año Nuevo? Entonces procurad no dejar de ser seres humanos… Ser humanos significa poner la propia vida en la ‘balanza del destino’ si es necesario…» (nt1). Esa es la cuestión, toda la cuestión. Rosa Luxemburg no conocía los manuscritos de Marx de 1844. Pero no hay duda del hecho profundo, de que Rosa compartía ese nuevo continente de pensamiento propio de Marx que parte de la revolución. Una revolución tan total y profunda que exige una reorganización total, empezando por las básicas relaciones entre hombres y mujeres. El énfasis de Marx en la necesidad de arrancar de raíz esa opresión sobre la mujer presente en todas las sociedades clasistas (y yo añadiría que también en las anteriores a ellas) da prueba de lo completa que era la idea de Marx de transformar la sociedad desde sus raíces. Tan completamente nueva era su filosofía de la revolución respecto a esa relación que Marx detectó la esclavitud de las mujeres incluso bajo el comunismo primitivo, al que admiró mucho al descubrirlo gracias a la obra de Henry Lewis Morgan sobre la vida comunal entre los iroqueses. Ciertamente estaba impresionado por la vida comunitaria y porque las mujeres tuvieran un papel muy superior al que tenían bajo el capitalismo. Sin embargo, para crear un nuevo tipo de relación entre hombre y mujer hacía falta mucho más que una «modernización». Engels usó las extensas anotaciones de Marx para escribir, al año siguiente de la muerte se éste, su Origen de la familia, la propiedad privada y el Estado. Pero Engels sólo glorificaba el comunismo primitivo, como si todo lo que necesitara fuera una especie de «actualización», allá donde Marx, el genio que descubrió un nuevo continente de pensamiento al desarrollar su filosofía de la revolución, percibió en la estructura familiar nada menos que elementos de «esclavitud» y de «servidumbre». (Este no es el lugar para desarrollar la diferencia entre Marx y Engels y por qué Marx es el genio que descubrió un continente completamente nuevo de pensamiento, mientras que Engels, pese a su talento y a ser el más cercano colaborador de Marx, no tuvo ese papel. Eso no excluye que a partir de la citada obra de Engels, dado que también se basa en las relaciones entre hombres y mujeres, las mujeres puedan alcanzar resultados verdaderamente nuevos si abordan su trabajo de manera multidimensional y dialéctica.) Durante toda su vida Rosa, como revolucionaria, como teórica, como mujer multidimensional, estuvo tan interesada en la espontaneidad de la revolución que, no sólo en contra de «los ilustrados» sino también contra los teóricos revolucionarios que pensaban que necesitaban «enseñar» la revolución a las masas, puso el foco en la gran verdad de que «la revolución no puede ser enseñada». Ni la «magnificencia» de la revolución y de la espontaneidad la llevaron a descartar la necesidad de la teoría. Es cierto que puede haber minusvalorado la «filosofía» como algo «abstracto», pero nunca minimizó la teoría de la revolución. Lo que nos concierne ahora es explorar qué impulsos podemos «captar» en el actual desarrollo del Movimiento de Liberación de la Mujer, impulsos de mujeres que pueden llegar a sentirse empoderadas y colaborar escribiendo o en diversas actividades, actuando al mismo tiempo en lo más inmediato (ya sea la Enmienda de Igualdad de Derechos, una huelga o cualquier otra cosa) y también profundizando en sus experiencias y en la teoría para encontrar un terreno común para el autodesarrollo universal e individual… Seguramente hay un momento en la vida de cada cual en el que queremos lograr algo en el futuro. No dudo de que en la etapa histórica actual las mujeres quieren arrancar desde sus raíces esta sociedad sexista, racista y explotadora. Comencemos por ahí.

Vuestra, Raya

Notas de la traducción de Trasversales

nt1. Raya Dunayevska, ya en el libro Rosa Luxemburg, Women’s Liberation, and Marx’s Philosophy of Revolution, vuelve a citar esta carta y señala que la referencia de Luxemburg a la reina amazona Pentesilea no se basa en la versión de la leyenda griega en la que Aquiles mata a Pentesilea sino en la versión del dramaturgo alemán Hein rich von Kleist en la que Pentesilea mata a Aquiles.

Marcelino Magdalena: un minero asturiano (Mario Guzmán, 1964)

Texto publicado en La Batalla, julio de 1964.

Con algún, retraso, determinado por motivos ajenos a mi voluntad, escribo estas líneas para recordar al gran luchador obrero Marcelino Magdalena, quien desde muy joven se destacó en la cuenca minera de Asturias en las luchas mantenidas por el proletariado contra sus explotadores.
Marcelino Magdalena comenzó a militar en el Sindicato Minero de la UGT y en el Partido Socialista. Cuando se produjo la escisión de 1920, Magdalena fue uno de los fundadores del Partido Comunista en Asturias. Como tantos otros socialistas asturianos y del resto de España, Magdalena consideró que la Revolución de 1917 había abierto una nueva etapa de la lucha del proletariado europeo y que su puesto estaba entre los defensores del Octubre ruso.

Magdalena permaneció en el Partido Comunista hasta 1932, fecha en que fundó en Asturias, con otros militantes comunistas como Benjamín Escobar, el Bloque Obrero y Campesino, que era ya en Cataluña la organización política obrera más importante. En 1922, cuando se produjo la gran crisis de la industria del carbón, la patronal minera no encontró otra solución que aumentar la jornada de trabajo y rebajar los salarios. Frente a tales planes, Magdalena, Escobar y otros levantaron la bandera de la rebeldía bajo el lema «¡Ni un céntimo menos, ni un minuto más!», actitud que les valió las simpatías de todos los trabajadores. Durante la dictadura de Primo de Rivera, Magdalena fue de los que mantuvieron en condiciones muy difíciles el movimiento obrero y comunista en Asturias.

En 1935, las organizaciones del Bloque Obrero y Campesino y de la Izquierda Comunista se fusionaron para dar nacimiento al POUM Magdalena fue uno de los fundadores del nuevo partido en Asturias y fue elegido miembro del Comité Central en el congreso de unificación celebrado en Barcelona. A partir de entonces, militó también en el Sindicato Único de Mineros de la CNT, defendiendo siempre con ahínco los intereses de los trabajadores que arrancan el negro mineral de las entrañas de la tierra.

Durante la Revolución y la guerra, Magdalena fue objeto de la hostilidad encarnizada de los dirigentes estalinistas, los cuales impidieron que jugara el papel que le correspondía. Sin embargo, Magdalena defendió intransigentemente las posiciones revolucionarias. Cuando se produjo el desastre final, Magdalena no quiso salir de Asturias. Permaneció aquí, compartiendo el calvario de la clase obrera conociendo vicisitudes sin cuento. En estos largos y terribles años de acción clandestina, el viejo luchador fue une animador y un educador incansable.

En 1962, durante la gran huelga minera, Magdalena tuvo que pasar dos meses encerrado en su casa de Mieres. Una pareja de la Policía Armada tuvo como misión aislarle de los mineros en huelga. Magdalena siguió con pasión el movimiento y, en la medida de sus posibilidades, cumplió con su misión de luchador minero.

Su consejo y su ayuda no nos faltaron nunca. Vivía pendiente de todo lo que ocurría en España y en el mundo y su gran pasión era discutir sobre los problemas del movimiento obrero de nuestra época. La llegada de La Batalla -y, estos últimos años, de Tribuna Socialista- era para él, como para todos nosotros, un gran acontecimiento. Magdalena se sentía fuertemente ligado a su partido, a nuestro partido, al que perteneció desde 1935 hasta su muerte.

Magdalena tenía una inmensa confianza en la clase obrera y, reconfortado por las luchas de los mineros de Asturias, estaba convencido de que se acercaba el fin del franquismo. Pero, desgraciadamente, él ya no tendrá la suerte de ver la aurora radiante de la liberación.

Hasta el último momento dio pruebas de una gran entereza. Cuando vio que se acercaba la hora de la muerte, insistió cerca de sus hijos para que le enterraran civilmente. Y sus hijos le prometieron que atenderían a sus deseos. Los mineros de Mieres y de Sama, los hombres que hacía poco habían librado una gran batalla contra la patronal y estaban preparando ya la próxima, escoltaron su cadáver hasta el cementerio y las flores rojas de los proletarios de la mina se acumularon sobre la tumba de uno de los hombres mas representativos del POUM en Asturias.

Asturias. Marzo de 1964.

El texto de homenaje y recuerdo de Mario Guzmán, que antecede, iba acompañado, en el número de julio de 1964 de La Batalla, de la siguiente nota sin firma.

ASTURIAS RINDE HOMENAJE A MARCELINO MAGDALENA

Hace unas semanas, poco antes de que se iniciara el nuevo movimiento huelguístico de los mineros y de los metalúrgicos de Asturias, falleció en Mieres, corazón de la zona minera, nuestro compañero Marcelino Magdalena, miembro del Comité Central del POUM.

En una conmovedora carta, recibida unos días después, nuestros compañeros de Asturias nos decían: «Hace solamente unas horas acudimos a acompañar por última vez a nuestro entrañable Marcelino Magdalena. El entierro fue suspendido por ser de carácter civil. Mejor dicho, se prohibió al inmenso gentío, todo el pueblo de Mieres y trabajadores de las localidades próximas, acompañar al cadáver por las calles, como es costumbre en la villa. Las autoridades sólo permitieron que se formara una larga caravana de coches. Estos coches, atestados de camaradas y amigos, siguieron la carroza fúnebre hasta el cementerio, donde se dio tierra al cadáver. El resto del público se fue alejando en pequeños grupos y haciendo las criticas que ya os podéis suponer. Con la Iglesia hemos topado, Sancho. Pese a todo, los mineros se concentraron para rendir el último homenaje a Marcelino Magdalena, dirigente del POUM y una de las figuras más destacadas del movimiento obrero astur».

En otro lugar de este mismo número [de La Batalla], el compañero Mario Guzmán, otro combatiente de Asturias, otro dirigente del POUM, habla de Magdalena, de su vida y de sus luchas. ¿Qué podemos agregar nosotros en estos momentos de dolor? Sólo una cosa, que nos parece esencial y que ahora ya podemos decir. En el curso de los últimos años, Magdalena estuvo en su puestos y no perdió el contacto con nosotros. Sus cartas fueron siempre optimistas. Como tantos otros, se sentía orgulloso de ser un proletario de Asturias y estaba seguro de que se acercaba la hora de la victoria sobre la dictadura franquista.

El POUM rinde homenaje a Marcelino Magdalena, revolucionario abnegado, militante ejemplar, educador de muchos de los jóvenes que estos días aparecen en Asturias como la gran esperanza del movimiento obrero revolucionario español.

100 años de Vlady (Claudio Albertani, 2020)

Claudio Albertani es el responsable del Centro Vlady de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México.

Petrogrado, 15 de junio de 1920: el ojo del huracán. Ese día nace Vladimir Kibalchich Rusakov, el futuro pintor Vlady. Rusia sale de la etapa más sangrienta de la guerra civil. Miles y miles de personas se encuentran armadas y organizadas para defender a la revolución. Petrogrado (antes San Petersburgo, después Leningrado) es una ciudad de frontera; el aire que se respira vibra más que en otras latitudes. Hay hambre, muerte y destrucción, pero también la fe inquebrantable en un mundo nuevo, libre de explotación y opresión.

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