El historiador francés Pierre Broué falleció el 26 de julio en Grenoble, la ciudad en la que había sido durante muchos años profesor del Instituto de Estudios Políticos y donde había escrito la mayor parte de sus libros y mantenido una intensa actividad militante bajo el signo del movimiento trotskista. Tenía 79 años y ejerció una importante labor intelectual y política hasta el fin de su vida.
Broué era un amigo con el que traté durante muchos años. Lo conocí en los años 60, cuando escribió y publicó, con el profesor Emile Temime, el libro La Revolución y la guerra de España , que es sin duda la obra de Broué que ha alcanzado mejor difusión en Francia, en España y muchos otros países. Le ayudé en todo lo que pude y tuvimos un intercambio de ideas y de documentación tan cordial como eficaz. Las cartas que se cruzaron entre nosotros son un documento que ha servido a varios historiadores. El caso es que este ejercicio nos llevó a una amistad que no se alteró nunca y que nos permitió organizar un coloquio y lanzar otro libro sobre la Revolución Española, que se publicó en l969 en Paris y se agotó muy pronto.
El desmoronamiento del franquismo y el restablecimiento de las libertades democráticas permitieron que Pierre Broué pudiera viajar a España y participar en diversos actos políticos en las Universidades y en otros círculos políticos y sociales. Pero en 1988, tras el lanzamiento de Trotsky en París, que es quizás la mejor obra de Broué, logramos organizar en Madrid un gran Homenaje a León Trotsky con la colaboración del Ministerio de Cultura animado por Jorge Semprún. Broué y diversos intelectuales españoles y franceses pudieron hablar en el Ateneo de Madrid y en otros centros culturales sobre la vida y la obra de León Trotsky, hecho sin precedentes en la capital de España, donde se habían lanzado en otros tiempos calumnias atroces contra la figura más significativa, con Lenin, de la revolución rusa.
Revisando papeles de Broué encontré ayer una tarjeta suya que acompañaba su libro sobre León Sedov, hijo de Trotsky. En la tarjeta me decía: Espero Wile que podrás hablar sobre esta obra en la prensa española. Gracias. Broué tenía un interés especial por llegar al público español porque pensaba que estaba falto de información sobre temas que eran muy suyos. Pues bien, con esta tarjeta en la mano cumplo con lo que ya no podrá pedirme. Pierre Broué era un gran historiador y un trabajador extraordinario. Asombra el trabajo que supone la biografía de Trotsky, su Historia de la Internacional Comunista y su Historia del partido bolchevique. Y asombra que haya podido escribir estos libros al mismo tiempo que dirigía el Instituto León Trotsky, los Cahiers de Leon Trotsky y la revista El Marxismo Hoy. Como asombran sus singulares viajes a Cuba y a Moscú. Por eso, es una lástima que algunas de sus obras no hayan sido traducidas al castellano y publicadas en España.
Podría contar mil cosas sobre sus viajes a Moscú en los últimos años. Como otros historiadores, había tratado de penetrar en los archivos de la GPU y en el Fondo Stalin. Había logrado ciertas informaciones de importancia. Pero, sobre todo, había tenido un interés enorme en hablar con los familiares de las figuras importantes del bolchevismo y lo había conseguido en parte con motivo de un acto de Memorial, la organización que defiende a las victimas de Stalin. Fue para él emocionante ver que había en la sala gentes que se llamaban Smilga, Antonov Ovseenko, Lomov, Vuyovic, es decir, nombres que recordaban la locura stalinista. Pudo hablar con ellos sobre el Gulag y hasta descubrir una nieta de Trotsky. Y un día me llamó por teléfono para decirme que había hablado con la viuda de Bujarin y ésta le había rogado que saludara a los militantes del POUM por el coraje que habían manifestado resistiendo al stalinismo
Hace unos años, cuando el gran cineasta Ken Loach lanzó su film Tierra y Libertad, varios camaradas franceses pidieron que organizáramos presentaciones con debate en diversos lugares de Europa. Se hicieron en Estrasburgo, en Ginebra, en Basilea, en Toulouse, en Burdeos, en París y en varias Universidades. Pierre Broué organizó el acto en Grenoble movilizando a los estudiantes, a la Universidad y a las librerías que expusieron libros sobre España y engalanaron sus establecimientos. Pierre Broué animó el festival y se sintió enormemente feliz. Evoco esta imagen para despedirme del autor de La revolución y la guerra de España, primer libro importante que abrió el camino para muchas obras considerables.